Salida en natación, logra

El objetivo de toda salida en natación, ya sea desde fuera del agua como desde adentro, es impulsarse lo más rápido posible antes de comenzar a nadar. Con práctica y entrenamiento, cada nadador va afinando su técnica, pero existe una serie de recomendaciones que queremos compartir contigo.

 

 ¿Qué es una salida en natación?

 

Es importante comenzar definiendo que la salida comprende todo el proceso desde que el nadador se sumerge hasta que sale a nadar a la superficie del agua. Este recorrido, que suele durar segundos, se describe con seis fases:

 

• Toma de posición
• Impulso
• Vuelo
• Entrada
• Desplazamiento
• Salida a la superficie

Como lo hemos visto, al existir distintos estilos de natación, cada uno implica tener un distinto estilo de salida tanto en competencias o simplemente iniciar un clavado de acuerdo al estilo que estamos buscando mejorar.

10 consejos para hacer una buena salida de cabeza

La práctica y la destreza de cada nadador hará que su salida en natación gane mayor impulso y velocidad. Sin embargo existen algunas recomendaciones para tener en cuenta a la hora de realizar el inicio con un clavado. Mira estos 10 tips:

 

• Tener el cuerpo flexionado hacia adelante con las manos en el borde anterior del borde de salida, dentro o fuera de los pies, pero brindando la oportunidad de usar la fuerza de los brazos para sostener el cuerpo.
• Mantener las rodillas ligeramente flexionadas para que la cadera esté lo más adelante posible a fin de desplazar el centro de gravedad hacia adelante.
• Mantener los pies separados acorde al ancho de la cadera.
• Utilizar los dedos de los pies para agarrarse con firmeza al frente del banco de salida.
• Al oír la señal, las manos empujan contra el banco de salida generando el desequilibrio de todo el cuerpo hacia adelante.
• Al soltar el borde de salida, las manos se extienden hacia adelante y las piernas hacia atrás. Es importante que el nadador apunte al lugar donde desea entrar en el agua.
• La cabeza debe estar hacia abajo en dirección al agua antes de que los pies abandonen el banco de salida.
• El cuerpo se flexiona por la cintura en el momento en que pasa por el punto de máxima altura del vuelo y, luego, las piernas se elevan alineándose con el tronco para efectuar una entrada hidrodinámica.
• Intentar que todo el cuerpo entre en el agua a través de un “agujero” imaginario creado por las manos. La cabeza se coloca hacia abajo entre los brazos.
• Cuidar que las piernas estén completamente extendidas y unidas y los pies se extienden en punta hacia atrás para lograr menor resistencia al agua y mayor velocidad.

 

A diferencia de las salidas de natación desde la superficie, una vez sumergidos en el agua encontraremos una resistencia mayor que hace más complicado el proceso. Al realizar un inicio de espalda, las recomendaciones para el nadador son las siguientes:

 

• Flexionar las piernas para darse impulso.
• A la orden de “en sus marcas” colocar todo el cuerpo en posición agrupada: esto quiere decir: la cabeza baja, los brazos flexionados por los codos y las caderas dentro del agua con los glúteos cerca de los talones.
• Al sonar la señal, echar la cabeza hacia arriba y hacia atrás dirigiendo la mirada hacia el otro extremo de la piscina.
• Impulsar los brazos hacia arriba y hacia atrás y completar la extensión de las piernas contra la pared. Los tobillos juegan un papel muy importante en este proceso ya que son el último empujón para darle fuerza al movimiento del cuerpo.
• En la fase de vuelo, las manos juntas se posicionarán por delante de la cabeza estirando los brazos hasta el punto de arquear la espalda.
• Las manos deben ser lo primero que entre en el agua, seguido de brazos, tronco y piernas. Es el momento de inhalar aire para la inmersión para una mayor resistencia sumergidos.

¿Estás listo para probar estas recomendaciones?

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