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Nadar después de comer: ¿Mito o realidad?
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Nadar después de comer: ¿Mito o realidad?
Quién no ha escuchado que nadar después de comer es malo para la salud. Nuestras madres y abuelas nos lo dijeron desde pequeños. ¿Pero es realmente malo? Y si lo es, todos deberíamos conocer la respuesta a la siguiente pregunta: ¿en cuánto tiempo después de comer puedo nadar?
En este artículo resolvemos de una vez por todas esta cuestión. Y también te damos consejos para preservar tu salud, sin sacrificar tu diversión o entrenamiento.
La verdad científica
Contrario a la creencia popular, la ciencia no respalda la idea de que nadar después de comer sea inherentemente peligroso.
Pese a ello, existe la creencia de que la digestión hace que llegue menos sangre a nuestros brazos y piernas, dejándonos con menos fuerza para nadar y aumentando el riesgo de ahogamiento o calambres.
Sin embargo, lo cierto es que diversos estudios revelan que nuestro cuerpo está perfectamente capacitado para manejar estas fluctuaciones y proveer la sangre y oxígeno necesarios tanto al tracto gastrointestinal como a nuestros músculos durante la actividad física.
Consideraciones importantes
Aunque nadar después de comer no es tan riesgoso como se pensaba, hay algunas consideraciones a tener en cuenta para una experiencia más cómoda y segura:
- Molestias estomacales: Nadar con el estómago lleno podría ser incómodo para algunos. El movimiento intenso y la respiración profunda durante la natación podrían provocar regurgitación o dolor abdominal. Por lo tanto, si acabas de consumir una comida grande, podría ser prudente esperar un poco antes de realizar actividades acuáticas intensas.
- Energía y alimentación: Comer alimentos ligeros y de fácil digestión antes de nadar puede ayudar a mantener los niveles de energía sin causar molestias estomacales. Se recomienda optar por opciones más ligeras que no sobrecarguen el sistema digestivo y que provean la energía necesaria sin dejar sensación de pesadez.
- Hidratación: Mantenerse bien hidratado es crucial, especialmente durante la actividad física. Beber agua o consumir alimentos ricos en agua, como frutas, puede ayudar a evitar la deshidratación sin sobrecargar el estómago.
- Tiempo de reposo para nadar antes de comer: Aunque la preocupación por nadar después de comer es más un mito que una realidad científica, se sugiere esperar entre 30 minutos a 1 hora después de comer para evitar molestias. Este tiempo reduce la sensación de llenura, haciendo la natación más cómoda. La duración exacta puede variar según lo que hayas comido y cómo te sientas. Escuchar a tu cuerpo es clave.
Lo último sobre nadar después de comer
En conclusión, la idea de que nadar después de comer es peligroso es más un mito que una realidad basada en evidencia científica.
Y si bien meterse al agua con un estómago muy lleno puede causar incomodidad para algunos, no hay pruebas suficientes que respalden el riesgo de ahogarse debido a ello.
En Club Cañada te recomendamos escuchar a tu cuerpo y entender cómo responde a la comida antes de la actividad física. Con moderación y siguiendo recomendaciones sensatas sobre la alimentación antes de nadar, puedes entrenar sin ningún problema.
Por último, si sufres de algún padecimiento gastrointestinal o de otro tipo y quieres empezar a nadar de forma regular, lo mejor es que consultes a tu médico antes de hacerlo.
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28 - julio - 2014